viernes, noviembre 23, 2007

Los sueños... ¿Reales o irreales?

Cada ser humano desea o quiere algo. Desde que nacemos hasta que llega el día de nuestra muerte. Desde que somos pequeños, soñamos con que nuestra mamá nos ponga atención solo a nosotros. Soñamos con ser grandes. Soñamos con tener las ventajas de ser adulto: conducir un auto, salir de la casa, ocupar cosas que se nos niegan por el simple hecho de ser niños. Luego, a medida que vamos creciendo, nuestros sueños siempre van variando. A veces soñamos con ser como esta persona. Soñamos con ser como esta otra persona. Y soñamos con ser como otras personas, desvalorizandonos. Los jóvenes generalmente sueñan con otras cosas. Algunos sueñan con ser jugador profesional de algún deporte. Otros sueñan con ser grandes profesionales. Otros sueñan cosas más difíciles de conseguir. Ganar la Uefa Champions League... Recorrer el mundo... Conocer a un personaje genial... Quizás otras personas sueñen cosas mas sensibles, como tener un papá... Como tener un plato de comida todos los días... Como tener un techo donde dormir... El mundo contemporáneo... El siglo XXI es tan injusto económicamente que lamentablemente hay personas que tienen esos sueños que para otros son situaciones normales... La diversidad de los sueños es tan amplia y tan sorprendente que enumerarlos todos nos llevaría mas tiempo del que tomó Miguel de Cervantes en escribir las dos partes del Quijote de la Mancha. Y quizás nunca acabemos... Pero independiente de la cantidad de sueños que existen, mucha gente dice "Mi sueño es..." y lo dice de una forma como si nunca lo fuera a obtener, y se refugian en la idea de que "Es un sueño... los sueños no son reales". Lamentablemente esa gente no sabe lo equivocada que está. Los sueños, es cierto, no son reales... Son manifestaciones del inconciente, debido a que a veces no se sabe por que queremos tal cosa. Pero también pueden ser reales. Un niño que soñó durante su infancia tener todos los días un plato de comida, puede cumplir su sueño. Un hombre que sueña con ser jugador profesional de un deporte lo puede lograr. Una persona que desea ser profesional lo puede lograr. Una persona que desea estar toda su vida con su amado/a lo puede lograr. Todos los sueños se pueden lograr... Nuestros sueños pasan a ser reales cuando nos proponemos que esos sueños salgan de nuestra imaginación... Y se manifiesten en el mundo real. Cuando nos proponemos cumplir esos sueños, es cuando esos sueños se vuelven reales. La gente pesimista nunca logra sus sueños, y a veces se alimenta destruyéndole los sueños a los demás. "Es que como vas a quedar en esa universidad..." "Es que como te vas a comprar eso..." "Es que como te vas a sacar un 70 tú..." "Es que como vas a viajar a Grecia si a veces no puedes ni salir de tu ciudad..." Muchos pretextos y mucho bla bla que hace que la gente dejé sus sueños a un lado. "No es que tiene razón... Como voy a poder sacarme un 70" "No es que eso es muy difícil para mi". Y la gente se envuelve en esas palabras, y en su mente crea anticuerpos en contra de cualquier tipo de intento a realizar ese sueño. Lamentablemente, esa gente negativa es la que a veces evita que otros brillen. Pero esas personas, que a veces se vuelven negativas por culpa de otros, ignoran un dicho muy bello y muy importante: "El que quiere, puede". Y no tiene ninguna ciencia, ni ninguna matemática, ni ninguna filosofía, ni ninguna técnica, ni secreto, ni estrategia, ni nada. Es así de simple. Si uno quiere de verdad hacer algo, se lo propone, y a pesar de todas las dificultades, todos los obstaculos, todas las malas lenguas, toda la negatividad, todo lo difícil, lo realizará igual. Hay una película llamada "Emily Brooke". Trata de una niña que soñaba con ser doctora. A los 11 años, tiene un accidente que la deja inmóvil. No podía mover ningún músculo de su cuerpo. Pero ella jamás renunció a su sueño. Y a pesar de su condición, y de su estatus social (era de la clase media), terminó estudiando en Harvard, con todo pagado, y se egreso como una de las mejores alumnas de la mejor universidad de los Estados Unidos. Pero... ¿Cuanta gente es capaz de tener tal fuerza de voluntad? Poca... Muy poca... Y lo peor es que a veces, conciente o inconcientemente, destruimos los sueños de otras personas. Y una persona sin sueños es una persona que no tiene sentido de vivir, por que todos perseguimos un sueño. En este mundo, la gente que surge no son los ricos, no son los políticos, no son los que tienen un magíster, no son los que saben más, los que son capaces de hacer mas cosas que los demás. Tampoco son los que nunca se caen. Los que de verdad surgen en este mundo son las personas que cuando se caen, son capaces de levantarse. Puede que se caigan miles de veces, pero mas que mas somos humanos, y cometemos errores. Pero es importante no matarse ni echarse a morir por el error. Asumirlo, levantar cabeza y corregir el error. La gente que de verdad vale es la que es capaz de levantarse a pesar de lo fea que pueda ser la caída. La que nunca se rinde ni tira la toalla por muy fea que se vea la situación. La que solo deja de luchar cuando ya escuchó el pitazo final. La que no deja de intentarlo nunca. La que no deja que nadie ni nada le destruya sus sueños. La que se cree el cuento. La que se cree capaz. La que no le importa lo que digan los demás. Y la que siempre es humilde. Yo conozco a una persona, que tiene problemas mentales. El quiere ser doctor. Mucha gente cuando escucha eso, se ríe. Personalmente yo también lo hice. Pero ahora me doy cuenta que ese hombre es grande. Y es grande por que tiene grandes aspiraciones. Quizás el no sepa su condición, pero nadie puede quitarle su sueño. Y nosotros, que somos personas sanas, tenemos aspiraciones mas chicas. Somos nosotros los chistosos. Los sueños pueden ser siempre reales. Solo va en nosotros. En querer lograr esos sueños. En querer que se materializen. En intentarlo siempre, independiente del resultado. El no abandonar esos sueños por que un estúpido nos dice que no nos conviene o no somos capaces. Los sueños son algo hermoso, y mas hermoso son cuando se vuelven reales. Y que se vuelvan reales está en nosotros. Se los dice alguien que sufrió una decepción hoy. Y esa decepción tiene que ver con un sueño para el, el salir campeón. Pero que aprendió que siempre hay segundas oportunidades, y que el único obstaculo para que ese sueño no se cumpla es abandonarlo.

No hay comentarios.: