viernes, junio 26, 2009

Capítulo 10

Como todos los días, mi despertador sonó a las 6:50 AM. Me quedé un par de minutos en la cama, como siempre, y a las 7 me levanté para comenzar otro día. Me había sentido muy extraño la noche anterior, como si algo me faltara, y una vez que terminé de ayudar a un amigo con un trabajo de matemáticas, me dormí. Sigo con esa sensación, pero me siento bien. Son mis últimos dos meses en el colegio, ya estoy en IVº medio y pronto me licenciaré. Estamos en lo último, tanto en lo académico como en lo sentimental. Como estas últimas semanas, me levanté con mucho ánimo y energía. Si pudiese definir mi vida en estos momentos, la palabra ideal sería “perfección”. Todo marchaba de absoluta maravilla, y hace dos semanas atrás conocí a una niña. Hemos hablado mucho, nos llevamos muy bien, todo ha sido genial. Las calificaciones han sido excelentes, el esfuerzo ha valido la pena. Mi relación con mi familia ha sido increíble, mis amigos son lo mejor, en fin… Todo marcha de una manera casi “irreal”, todo es demasiado perfecto.

Me duché, vestí, bebí un poco de leche, tomé mi mochila con los cuadernos del día y mi notebook, me puse mis audífonos para caminar escuchando música, y salí. En el colegio, todo era lo mismo, pero era perfecto: Clases, sus momentos para conversar con mis amigos y molestar un rato, y en el recreo estaba con aquella niña. Y cuando salía de clases, llegaba a mi casa a estudiar un poco, hacer los trabajos y jugar videojuegos. Y luego me quedaba hasta altas horas de la mañana chateando con mis amigos o con aquella niña, con quién al cabo de un tiempo, fuimos novios. Así transcurrió mi vida “perfecta”. Salí de cuarto medio, rendí mi prueba para entrar a la universidad, donde me fue medianamente bien, pero no me alcanzó para quedar. A pesar de algunas pequeñas dificultades por eso, salí adelante y continué mi vida al lado de mi hermosa novia y mis amados amigos.

Pero, como en la vida no existe la perfección, comenzaron los problemas, principalmente conmigo mismo. Comencé a escuchar una voz, que me tentaba a volver a ser frío, por que hace poco más de un año yo era una persona totalmente fría e indiferente a todo, pero cambié. Esa voz luchaba todos los días contra mí y mis sentimientos, reprimiéndolos y llevándome a un estado total de división mental. Y así pasé muchísimos días, luchando una y otra vez conmigo mismo. Por momentos, “eso” vencía, por otros momentos, yo vencía. Hasta que la situación se volvió totalmente incontrolable, por momentos era una persona, y por otros momentos era otra totalmente diferente. Y siendo de esta manera, dañaba a la gente, puesto que a veces era la persona más buena del mundo y otras veces no me importaba nada ni nadie. Luego, todo comenzó a andar mal. Las cosas con mi novia no funcionaban del todo bien, con mi familia tampoco, y mis amigos no podían estar conmigo por motivos totalmente comprensibles, también tenían su vida y sus estudios. Para evitar más sufrimiento, tanto de mí para los demás, y de los demás hacía mí, me marché de mi ciudad, y comencé todo desde cero. Dejé que la otra parte ganara completamente la lucha, que se apoderara de todo, y volví a ser el de antes. Como toda persona, también tengo sentimientos, pero los he oprimido totalmente para no volver a sufrir ni hacer sufrir. Quería recordar mi pasado, ya que en estos momentos estoy acá en el laboratorio de los Filósofos, y está todo listo para la primera prueba, si falla, moriré, si todo resulta bien, debería volver a sentir el mismo poder que sentí cuando Espectro me atacó. Estaba conectado a unos extraños cables. De pronto, escuché una voz que dice “Aquí vamos”, y comenzó todo. En un comienzo, sentí que se desgarraba todo el cuerpo. Sentí una enorme presión en el pecho, y de pronto, todo aquel recuerdo de mi vida pasada se fue borrando poco a poco. Sentí que algo así pasaría, así que los había escrito todos en un diario. Luego que todos esos recuerdos se fueron, me sentía extraño. Sentía que mi cuerpo estaba a una temperatura muy baja, pero no sentía frío ni nada parecido. Y comencé una vez más a sentir esa hermosa sensación de poder, esa fuerza indescriptible. Pero de pronto, comenzó a sonar la alerta de falla. Algo andaba mal, pero yo no sabía que era. Yo sentía ese poder y esa fuerza, todo parecía estar bien. De pronto observé que todos los científicos huyeron, y comencé a desesperarme, pero no podía moverme. Luego, hubo una explosión, y perdí el conocimiento. Solo tengo unas imágenes en donde unos científicos me cargan, y observé que cargaban otro cuerpo, que me resultó muy familiar. Pero antes de poder observarle el rostro, perdí nuevamente el conocimiento. Desperté 3 días después de incidente en una de las habitaciones de descanso del laboratorio. Uno de los científicos me explico que el experimento fue un éxito, y estaba a punto de pronunciar otras palabras, cuando salí a comprobarlo. Y era cierto, sentía aquel poder, y me hicieron probarlo con los escombros de la explosión. Destruí totalmente todo, el poder y la fuerza eran increíbles, más allá de cualquier humano. Pero de pronto, todo el poder se esfumo, desapareció por completo, y volví a ser el mismo ser débil y con fuerza humana de antes. Le pregunté al científico que sucedía, y el me explico que el poder por ahora será intermitente, podré usarlo pero solo por un corto período de tiempo, alrededor de 15 a 20 minutos. Siempre tiene que existir un pero. Pero me dijo que podía lograr que fuese permanente. Pero para eso, debía encontrar lo que me faltaba…

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