miércoles, diciembre 31, 2008

Fin Año 2008

Y llegamos. Se nos va un año más. Un año espectacular para mí. Tuvo sus momentos malos, como todo, pero todo ha sido opacado por las grandes cosas que me pasaron. Agradecer a todas las personas que son importantes para mí y que siempre estuvieron ahí.
Resumen del año en distintos aspectos:

1º Estudios: Fue un año excelente, el mejor de mi vida. Me esforzé por tener buenas notas y sacar un buen puntaje PSU, y creo que ambas las conseguí ^^. Saqué primer lugar, y el regalo me permitió comprarme DVD's xD!. Ahora espero al 2 de enero, para ojalá quedar en la universidad.

2º COLO-COLO: De que viajé, viajé. De que pude viajar más, también es cierto. Pero privilegíe el estudio, y eso me privó de muchísimos viajes. Aunque jamás olvidaré la gira al sur o el viaje a Argentina. O aquel partido donde perdíamos 1-0 con Ñublense, y lo dimos vuelta para pasar a la final. Recorrimos muchísimos lugares por esa amada camiseta, y con este último título se coronó todo. Saludos a todos los VI*DISTORCION, a los netos y de verdad, y a todos los garreros de Arica a Tierra del Fuego con los que se compartió.

3º Dinero: Siempre COLO-COLO se adjudica los mayores gastos, y en mayor cantidad que el año pasado.

4º Familia: Tuve mis problemas con mi familia, todos solucionados. Ahora, creo, somos felices. Agradecer a mi mamita que siempre estuvo ahí para apoyarme. Pasaremos el segundo año nuevo consecutivo en nuestra casa, eso me encanta =D

5º Amigos: ¿Que puedo decir? Solo agradecer. Siempre estuvieron ahí, ayudandome, apoyándome, escuchandome... Son, junto con mi familia, lo mejor que me ha pasado en mi vida. Gracias por todo, y saben que siempre pueden contar conmigo. No es la gran cosa, pero es algo...

6º, y último punto, Amor: ...

Creo que no se me escapó ningún detalle. Creo...

Canciones del año:

-November Rain, By Guns N' Roses
-So Fine, By Guns N' Roses
-Brave New World, By Iron Maiden
-Paschendale, By Iron Maiden
-No More Lies, By Iron Maiden
-The Number of the Beast, By Iron Maiden
-Angel, By Judas Priest
-Painkiller, By Judas Priest
-Lost Love, By Judas Priest
-Promises, By Megadeth
-I'll Be There, By Megadeth
-One, By Metallica
-Sad But True, By Metallica
-Disciple, By Slayer
-Raining Blood, By Slayer
-Master Exploder, By Tenacious-D
-Mi Corazón Encantado, Por Alejando Arnais
-Leave No Man Behind, By Hans Zimmer
-My Inmortal, By Evanescence
-Eyes On My, By Faye Wong
-No Seria Mejor, By Charm (Adaptación de Suteki Da Ne)
-Debriefing, De Metal Gear Solid 3
-Dime Que No, Por Ricardo Arjona
-Across The Universe, By The Beattles
-Ultraviolet, By U2


Y finalmente, la cancion con dedicatoria:

Nothing Else Matters, As Made Famous By Metallica

So close, no matter how far
Couldn't be much more from the heart
Forever trusting who we are
and nothing else matters
Never opened myself this way
Life is ours, we live it our way
All these words I don't just say
and nothing else matters
Trust I seek and I find in you
Every day for us something new
Open mind for a different view
and nothing else matters
never cared for what they do
never cared for what they know
but I know
So close, no matter how far
Couldn't be much more from the heart
Forever trusting who we are
and nothing else matters
never cared for what they do
never cared for what they know
but I know
Never opened myself this way
Life is ours, we live it our way
All these words I don't just say
Trust I seek and I find in you
Every day for us, something new
Open mind for a different view
and nothing else matters
never cared for what they say
never cared for games they play
never cared for what they do
never cared for what they know
and I know
So close, no matter how far
Couldn't be much more from the heart
Forever trusting who we are
No, nothing else matters

DEDICADA PARA MIS QUERIDOS AMIGOS
¡LOS MEJORES DESEOS PARA ESTE AÑO ENTRANTE!

sábado, diciembre 20, 2008

Capítulo 8

Había pasado un año desde aquel incidente. Yo me encontraba descansando en mi casa, ordenando y preparando todo. Hoy en la noche nos reuniríamos Gilder, Petit, John, Fernando, Dopamina y unas amigas y amigos de Dopamina. Por tanto, debía estar todo en orden. La sensación de odio que experimenté hace un año no se volvió a producir, algo que a veces extraño. Ese poder era indescriptible.

Alrededor de las 9 PM, llegaron todos los invitados juntos. Estábamos Gilder, Dopamina, Petit, John y su pareja, Fernando también con su pareja, y dos amigas más de Dopamina, Eva y Cecilia. Nos sentamos en la mesa a disfrutar una cena, y charlamos mucho. Parlamos de distintos temas, pero en ningún momento se tocó el incidente, el cual luego de ocurrido se hizo público. La versión final que se entregó fue que Espectro era un científico malvado que quería dominar el mundo, y que nosotros fuimos quienes lo detuvimos. Se nos dieron premios y se nos galardonó en todos lados. Yo no fui a ninguna premiación, por lo que todas me llegaban a la casa, que no ha cambiado en nada. En cierto momento, Eva toca el tema y dice:

-Que extraña me siento de compartir mesa con héroes como ustedes- dijo con voz coqueta- pero ahora podrían contarnos todo lo que ocurrió ahí

-Si, nosotras no sabemos nada más fuera de la versión oficial- Dijo Cecilia. Su voz, de alguna manera, me cautivaba.

-¿Qué les podemos contar?- Dijo Petit –Fue algo de verdad muy difícil, pero pudimos sacarlo adelante.

-De hecho en algunas ocasiones- comenzó a relatar John -pensamos que todo estaba perdido.

-Pero pudimos derrotar a Espectro…- prosiguió Gilder -Y volver sanos y salvos a nuestro hogar.

Y así prosiguieron conversando sobre el incidente durante alrededor de dos horas. Yo solo escuchaba. No me gustaba recordar aquél incidente, por que recordaba las cosas que más he deseado en mi vida: Una pareja que me ame, y ser mejor que el resto. Dopamina era parte de mi pasado, y logré dejarla atrás con facilidad, también en parte a que somos grandes amigos y prefiero miles de veces más su amistad. Pero ser mejor que el resto es algo que lo tuve en mis manos. El invento de Espectro logró que yo fuera superior por momentos. Pero ese inventó ya desapareció. Eso me ha deprimido todas las noches desde el incidente. En esos momentos, la voz de Cecilia interrumpió mi pensamiento.

-Y usted, señor………. ¿Qué piensa al respecto? ¿No tiene nada que decir sobre el incidente?- Dijo la joven, preguntándome claramente a mí.

Yo la miré fijamente, y respondí:

-La verdad, señorita Cecilia, es que no. Para mi el incidente es cosa del pasado, y el pasado jamás vale la pena recordarlo, por muy glorioso que sea. Usted siente que está con héroes, pero aquí no hay héroes. Somos solo soldados normales que cumplieron con su deber.

Ella me miró fijamente con mucha ternura. En eso, Gilder exclama:

-¡¡Pero hombre por favor!! Quizás nosotros no seamos héroes, pero tú sí que lo eres. Fuiste tú quién nos rescató cuando nos atraparon, fuiste tú quién mató a Espectro, y fuiste tú quién nos dio fuerzas para seguir adelante-

Yo me reí sarcásticamente. ¡¡Que bobadas!! Yo hacer todo eso. ¡Já!

-Así que, el modesto hombre que considera que no son héroes, en realidad es el héroe más grande del incidente por lo que veo.- Dijo la joven Cecilia.

-Ya le dije, señorita, que no soy ningún héroe- Dije secamente. La situación era bastante incómoda.

-Quizás usted no se considere un héroe, pero sus amigos si- Respondió ella.

-Es la opinión de ellos, la cual no comparto- Repuse. Comencé a molestarme, Cecilia insistía bastante y era cargante.

La joven me miró fijamente a los ojos, y me dijo:

-Apuesto a que debajo de esa coraza se esconde una gran persona- dijo con dulce voz.

-Eso, Cecilia, lo dejo a su criterio. Solo quiero decirle que no hay ninguna coraza, ni ningún héroe, ni nada. Somos hombres comunes y corrientes. La única coraza que tengo es mi piel, y mi chaleco antibalas en la guerra. Ahora le pido que por favor no toque más el tema, por lo menos no en mi presencia. Si yo fuera héroe, no tendría la mala suerte ni me faltarían las cosas que me faltan. Ahora, con el permiso suyo, me retiro por que hay muchos platos que lavar. Espero la comida haya sido de su agrado. Si no, le pido que me disculpe.- Dije, y me retiré de la mesa.

La joven Cecilia quedó mirando fijamente hasta que yo desaparecí de la sala. Los demás observaron el episodio, y Dopamina le dice a la muchacha:

-No te preocupes. El es así. Odia tocar ese tema, y no reconoce sus propias virtudes. Hemos tratado de hacerle entender, pero nos ha sido inútil. Pensé que había cambiado, pero al parecer me equivoque- dijo con voz apagada.

Cecilia observó a Dopamina fijamente y pucho mucha atención mientras hablaba, y luego se despidió de todos por que debía irse. A los minutos, todos se fueron. Por fin volví a estar solo. Ordené todo, y me fui a dormir. Antes de hacerlo, pensé en uno de mis mayores anhelos, tener una novia. Y recordé aquel día, cuando tenía 16 años y dije “Algún día, el nunca haber tenido novia me pasará la cuenta”. La situación me daba la razón. Necesitaba a alguien. Pero luego reflexioné, y dije “Yo no pololeo por un simple motivo: Soy una mierda de persona. Nadie podría pensar en mí fuera del estúpido cartel de héroe que adopté luego de ese maldito incidente”.

Cuando comenzaba a dormir, alguien tocó la puerta. Era Dopamina. Tenía un aspecto horrible, estaba muy deprimida. Le pregunté que había sucedido. Estaba llorando. Que patética…

-Gilder… Gilder… ¡¡Gilder me engaño!! Lo encontré escondido besándose con Eva.- Dopamina lloraba patéticamente, y yo no entendía por que.

-Tengo solo dos preguntas. La primera, por que lloras, y la segunda, por que viniste aquí.

-Lloro por que me dolió que haya hecho eso. ¡Teníamos tantos planes! Y vine aquí por que necesitaba contarle a alguien.

-Entonces, piensa en otra persona. Yo no te voy a solucionar tu problema, por que tengo mis problemas también. Ocúpate de tus asuntos, y yo de los míos. Y no me metas en tus dilemas. Además, no se como te pudo doler si no te golpeó ni nada parecido…-Dije. Me pareció lo mas adecuado que le pude decir, y lo menos hiriente. Dopamina me miró, no pronunció ninguna palabra más y se marchó… Antes de cerrar la puerta, me dijo:

-Se suponía que éramos amigos. Pero al parecer, eres demasiado frío para entender a la gente. Espero que algún día te des cuenta…

-Que te vaya bien, adiós- le respondí. Encontré absurdo lo que me estaba diciendo.

Cuando se fue, me apresté a dormir de nuevo, muy enojado. ¿Por qué demonios acudió a mí para contarme semejante estupidez? Yo tengo mis problemas, y no le voy a ir a solucionar los suyos. Cada uno es responsable de sus problemas. Y aún no entiendo como demonios le pudo doler, si no mencionó que la hayan golpeado. Quizás le dolió el “corazón”, como alguna gente dice. Que grandiosa estupidez. Los sentimientos solo sirven para que podamos ser manipulados. Nos vuelven débiles y vulnerables. En pocas palabras, no sirven para nada útil. Y es tan fácil aparentarlos, que no cuesta nada engañar a la gente. Esa habilidad me servirá bastante en futuras guerras. Y con ese pensamiento, me dormí profundamente. Y como en todas las noches de mi vida, no soñé nada...

domingo, noviembre 30, 2008

A horas de la PSU...

Y hasta aquí hemos llegado. A la prueba final. A la famosísima PSU; prueba de selección universitaria. Presión, nerviosismo, estres, deseperación incluso ronda en la mente de la mayoría de los jóvenes que rendiremos mañana esta estupidez. La presión de quedar en una buena universidad, de sacar un buen puntaje... Presión que a muchos en el momento los mata, a otros los hace fuerte, y a otros simplemente no les afecta. A mi, me afecto mucho días atrás, cuando se me pidió que me fuera bien. Mis amigos y cercanos sabrán a que me refiero. Fueron días de mucha presión, solo pensaba en la prueba y que me fuera bien. Tuve el apoyo de mis cercanos, y sin ese apoyo quizás habría sido distinta la historia. Habría terminado estresado, agotado, y quizás ahora muchísimo mas preocupado y nervioso. Pero no lo estoy. Estoy tranquilo, sé lo que puedo rendir, sé que yo puedo quedar y que soy totalmente capaz. Confianza que apareció hace muy poco, y que agradezco que haya aparecido. Y si me va mal, hay alternativas, y buenas. Sé que en caso de ocurrir lo último, la gente de verdad me apoyará, y eso me hace tenerle menos miedo a esta tontera llamada PSU. Solo tengo un miedo, innecesario nombrarlo, pero tengo muchísima fe en que eso no pasará.
Agradecer a todos los que me han ayudado a llegar hasta aquí, espero no decepcionarlos. Agradecer a mis amigos, a mis papás, a los profesores, mi tío, Kunky, familiares... Agradecer a todos los que han confiado en mí, espero no decepcionarlos. Agradecer a todos los que me han ayudado a llegar a esta instancia tan decisiva, a los que han apoyado siempre, han ayudado, han querido, han retado, han tenido paciencia, etc... Agradecer a todos los que se dignaron a desear buenas vibras y que me vaya bien mañana, en especial a las únicas dos personas que me llamaron para eso, Kunky y mi tío Claudio. Para desearme lo mejor, y decirme que no importa el resultado, ellos estarán siempre ahí. Y sé, que no son los únicos...
Y aquí estamos, esperando a dar la prueba final. Con optimismo y confianza, algo insólito en mí, pero que apareció. Mas vale tarde que nunca, dicen, pero la verdad, apareció cuando de verdad lo necesito ^^. Les deseo lo mejor a todos, ojalá cada cual logré el puntaje que necesita para entrar, y si no, siempre hay alternativas, y buenas. Solo hay que informarse y buscar. Los mejores deseos para mañana a todos, sin excepción, pero en especial a mis amigos. Todos somos capaces de lograr lo que queramos, siempre y cuando eso que queremos, lo queramos de corazón. El mejor éxito para todos mis seres queridos. Los quiero muchísimo a todos.

jueves, julio 17, 2008

Metal Gear Solid 3: Snake Eater

Buenos días, Snake. Espero que hayas dormido bien. Primero que nada, debo de darte mis disculpas. No fui mandada por Khrushchev (Rusia). No soy una espía de la KGB y nunca trabaje para el NSA (Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos de América). Soy una agente de la República Popular de China... Todo fue una mentira. Te engañé, perdóname.

Los Filósofos todavía existen en China, también. Verás, mi misión era encontrar donde Volgin estaba escondiendo el Legado y robarlo. Así que me infiltré en su base como una espía de la KGB. Los dos hackers de la NSA que defectaron en 1960 realmente eran hombres. El ADAM real nunca se apareció en la junta [después descubres que ADAM realmente era Ocelot, así que sí se apareció en la junta], evitándome tener que matarlo. Así que pretendí ser EVA. Y tú y Sokolov y Volgin: me creyeron.

El Legado originalmente era para EE.UU., URSS, y China. No podíamos dejar que Rusia o Estados Unidos se lo quedaran todo para sí mismos. El gobierno chino también tenía sus ojos puestos en el Legado. Obtuve la filmina que contenía el Legado. Y también el lanzador nuclear de misiles del Shagohod... Crearemos una fuerza que rivalizará a la URSS y a Estados Unidos. Todo marchó como se había planeado, gracias a tu ayuda. Yo también soy uno de los agentes de los Filósofos, entrenados en escuelas especiales. Crecí en un complejo de EE.UU.-URSS-China...

Sin embargo, ella lo supo desde el principio. Ella lo supo porque antes de la guerra era una instructora en las escuelas de los Filósofos. The Boss fue la única a la que no pude engañar. Ella me contó todo. Por qué abrió su corazón a mi? Primero no entendí, pero ahora creo que sí. Snake, ella quería que supieras la verdad. Ella me escogió para decirte todo. Por eso salvó mi vida. Te he mentido tantas veces, pero esta vez no lo haré.

Mis ordenes del gobierno fueron obtener el Legado y matar a todos los que supieran la verdad sobre qué había ocurrido. En otras palabras, debí matarte pero no lo puedo hacer. No porque nos amamos, ni tampoco porque me salvaste mi vida, sino porque hice una promesa a The Boss y planeo cumplirla. Solamente quería que lo supieras. Y tienes que vivir.

Snake, escúchame. Ella NUNCA traiciónó a los Estados Unidos. De hecho, hizo todo lo contrario. Ella fue una heroína que murió por su país. Cumplió su misión aun y cuando sabía lo que le pasaría.

Sacrificio propio; porque ese era su deber.

[Aquí el Presidente de los Estados Unidos de América le dice a Snake: Estás encima incluso de The Boss. Por esta razón te otorgo el título de Big Boss.]

[Eva continúa con la historia:] El defectamiento de The Boss fue una farsa hecha por el gobierno de Estados Unidos. Todo fue un gran teatro puesto en escena por Washington para que pudieran obtener el Legado de los Filósofos.

The Boss fue la estrella de este teatro [con teatro se refiere a la mentira que inventó el gobierno]. Ellos lo planearon de tal manera que pudieran obtener el Legado que Colonel Volgin había heredado, y destruir al Shagohod al mismo tiempo. Solamente un héroe legendario como The Boss pudo haberse ganado su confianza. Descubrir donde estaba escondida la filmina con el Legado de los filósofos sería su misión. Todo marchaba según el plan. Pero luego algo que nadie pudo haber predicho sucedió:

Colonel Volgin disparó una ojiva nuclear hecha en Estados Unidos de América al centro de investigación de Sokolov. El Jefe de la URSS demandó que el gobierno de EE.UU. comprobara su inocencia. No podían simplemente abortar la operación para robarse el Legado. Así que la operación en si fue revisada otra vez . Las autoridades en Washington sabían que para probar su inocencia tendrían que deshacerse de The Boss; y uno de ellos tendría que hacerlo.

El público nunca se podría enterar de esto. NUNCA. Esto, concluyeron, sería la mejor manera de mantener todo secreto. No se le permitiría a The Boss regresar viva. Y tampoco se le permitiría suicidarse. Su vida tendría que ser terminada por su discípulo más querido. Así lo quería el gobierno. Esa fue la misión que se le dio. Y no tuvo más opción que seguirla. Su muerte ante tus manos fue una tarea que tenía que cumplir. Por dicha tarea, le dio la espalda hasta a sus propios camaradas. Una "menos mujer" hubiese sido aplastada por tal tarea.

La mancha de la desgracia la acompañará a su tumba. Generaciones futuras la odiarán. En Estados Unidos, como una traidora inhumana, sin ningún sentido del honor. Y en Rusia, como el monstruo que desencadenó dos catástrofes nucleares. Ella será recordada en la historia como una criminal de guerra. Nadie la entenderá. Esa fue su misión final. Como una verdadera soldado, ella la cumplió.

Pero creo que ella quería que tu supieras la verdad. Ella quería continuar viviendo en tu memoria. No como una soldado, sino como una mujer. Pero se le prohibió decírtelo. Por esta razón, ella me lo dijo a mi.

Snake, la historia nunca sabrá lo que hizo. Nadie se enterará de la verdad. Su cuento, su reporte, perdurarán únicamente en tu corazón. Todo lo que hizo lo hizo por su país. Sacrificó su vida y el honor por su patria. Ella era una verdadera heroína.

[En pocas palabras, The Boss NUNCA traicionó al gobierno de los Estados Unidos de América. Realmente siempre estuvo siguiendo lo que el gobierno le había dicho: Obtener el Legado de los Filósofos. Para ganar el aprecio de Volgin, le tuvo que entregar dos bombas nucleares. Sin embargo, cuando Volgin lanzó una, se creó un incidente internacional (El gobierno de Estados Unidos creía que Volgin no las lanzaría). Para solucionar el incidente, el gobierno de EE.UU. decidió eliminar a The Boss.]

ESPERANDO CON ANSÍAS DAR FIN A ESTA OBRA DE ARTE, CON METAL GEAR SOLID 4: GUNS OF THE PATRIOTS

lunes, junio 23, 2008

Capítulo 7

Al llegar la mañana, desperté con energías renovadas. Desperté a todos, y les dije que no llegaron refuerzos. Que iría a detener a Espectro. Petit y Gilder se miraron, y dijeron que me acompañarían. John y Fernando no quisieron ir. Entonces, decidimos que ellos se quedarían con Dopamina. Partimos yo, Petit y Gilder a detener a Espectro. Pero a mi no me interesaba detener su plan (si es que lo tenía) ni a su ejército. Solo quería vengarme. Y el odio me invadió.

El este de la ciudad estaba a 12 kilómetros del centro, y este, a su vez, a 40 kilómetros de la cueva donde nos encontrábamos. Por lo tanto, era bastante lo que debíamos caminar. En el camino, Gilder y Petit fueron conversando sobre sus planes a futuro, sus becas, sus logros militares. Yo, por mi parte, solo me concentraba en el odio que le tenía a Espectro, que iba en aumento. Llegamos al atardecer al este, y nos encontramos con un pequeño edificio que no fue destruido. Sin duda que Espectro estaba ahí. Gracias a las excelentes tácticas de Petit y Gilder, logramos entrar en el edificio y llegar al último piso, donde se encontraba Espectro. Cuando llegamos, no se sorprendió en vernos.

-Los estaba esperando. Pasen –Dijo, con una amabilidad bastante extraña

Entramos, sin bajar la guardia en ningún momento. Estábamos en un laboratorio gigantesco, con muchísimos cuerpos humanos encerrados, y otros tantos seres, también encerrados.

-Bienvenidos a mi laboratorio –Dijo Espectro- Aquí he desarrollado toda la tecnología que usaron mis soldados para destruir esta ciudad y sus habitantes.

-Espectro- Dijo Petit –Te pedimos de buena manera que te entregues pacíficamente.

-¿O si no que? ¿Me dispararán?- Respondió sonriendo el monstruo

-No. Sabemos que las balas no te hacen nada. Pero no podrás derrotarnos a los tres- Dijo Gilder

-¿Ustedes creen?- Dijo Espectro, en el mismo momento en que corrió hacia nosotros, para atacarnos. Nosotros lo esperábamos, pero no tuvimos oportunidad. Su descomunal fuerza y su increíble velocidad nos derribaron en un instante, dejándonos heridos.

-Podría matarlos a los tres si quisiera- Dijo- pero no puedo. Los necesito. Escuchen atentamente, por que ahora les explicaré todo.

-Esos seres que ustedes decían, no son seres. Son humanos. Son humanos despojados de todo sentimiento positivo. Solo tienen el odio, y aborrecen a toda persona que tenga sentimientos. Crearlos me llevó años de investigación, para darme cuenta que los sentimientos son algo creado por el cerebro humano, por un químico llamado “Estermoglobita”, que esta presente en toda la piel, y acumulados de especial manera en la casa. Cada “estermoglobita” es responsable de cada uno de los sentimientos. Pero, son frágiles. Al ser el cerebro expuesto a fuertes vibraciones nucleares libres de radiación, las estermoglobitas de destruyen. Y en base a eso, cree las armas que ustedes vieron. Ahora, si esa arma es modificada levemente, agregándole, además de las vibraciones nucleares, muchas “estermoglobitas O”, el cuerpo no es destruido, solo despojado de sus sentimientos positivos, y viviendo solo con odio. Y con odio, las personas con fácilmente manipulables. Basta decirles a esos estúpidos que otra gente si tiene sentimientos positivos, para que quieran matarlos. Y en base a esa investigación, he creado este ejército, que no siente remordimiento por nada ni nadie, y que es una verdadera máquina de matar. Además, las vibraciones nucleares hacen que los músculos reaccionen, dándole fuerza sobrehumana al que las reciba.

Los tres estábamos totalmente desconcertados. Increíblemente, todo esto tenía explicación racional. Pero… ¿Por qué a mi no me mataron esas vibraciones nucleares, pero tampoco me transformaron en esa cosa?

-El experimento me tomó años- Siguió hablando Espectro, interrumpiendo mi pensamiento- Pero tuvo resultados positivos. Yo fui el conejillo de indias, pero me excedí en la dosis. Por eso crecí, y mi expresión contiene más odio que los otros. Con esta arma, soy invencible.

-¿Y para que mierda nos quieres a nosotros?- Preguntó Gilder.

-¿A ustedes? Jajajajaja no a ustedes. Solo a uno- Me tomó a mí, me arrastró a su lado, y siguió hablando- Solo necesito a este hombre. Este hombre, el cual tiene una mínima presencia de Estermoglobitas en su cuerpo. Por eso el arma no le hace nada. Solo le inyecta la “estermoglobita O” en el cuerpo, además de darle fuerza. Adivinen a que sentimiento corresponde la “estermoglobita O”…

-¿Al odio?- Respondió Petit

-Exacto- Prosiguió Espectro –Con este hombre de mi lado, puedo dominar completamente el mundo. Los efectos en el son sorprendentes, incluso por sobre lo que yo esperaba. Ahora, despídanse de su amigo, por que ahora comenzará a ser otro totalmente distinto.

Espectro apuntó el arma hacia mí, y el tubo se encendió. Sentí de nuevo esa espectacular sensación. Ahora era mas intensa, y sentía mucho mas poder.

-Contemplen como su amigo deja sus escasas estermoglobitas de lado, y deja que el odio lo invada completamente- Decía Espectro, mientras su cara de odio se modificaba ligeramente, y la satisfacción llenaba todo su rostro.

Luego, hubo un gran estruendo. El tubo se apagó, y me puse de pie. Sentí como el poder fluía en todo mi cuerpo. En eso, Espectro pronunció las palabras que me sacaron de sí, y que me volvieron loco.

-Ellos también aman a Dopamina. ¿Querías ser superior a ellos? Ahora lo eres. ¡¡Acábalos!!- Gritó el malvado científico.

Me acerqué a ellos, y los odie. Los odie. Los odie profundamente. Lo decidí. Los iba a matar. Así le demostraría a Dopamina quién es el mejor. Luego, mataría a Espectro, para consumar mi venganza. Llegué donde estaban los débiles. Se pusieron de pie.

-¡¡Reacciona!! ¡¡Reacciona!!- Me pedía a gritos Gilder

-No dejes que te controlé- Exclamó Petit. Pero a mi me daba lo mismo ser controlado. Era superior a ellos.

-Petit. Gilder. Prepárense. Por que vamos a pelear- Les dije, y mi rostro adoptó un odio aún mayor al que emitía Espectro.

Los dos débiles se dieron cuenta que no tenían opción. Pensaron que si me derrotaban, volvería en sí.

-Tú lo quisiste. Nunca podrás con nosotros. Aprobamos con un 100% de efectividad todos los módulos de combate sin armas, mientras que tú solo con un 56,8%- Dijo Gilder.

Ambos me atacaron. Sus golpes eran como moscas posadas en mi cuerpo. ¡¡¡El poder era increíble!!! Los débiles seguían atacando, mientras yo los miraba y recibía todos los golpes, que no eran más que mierda para mí. Era mi turno. De un solo golpe, derribé a Gilder, y lo dejé malherido. Petit quedó estupefacto. Fue a ver como estaba Gilder. ¡¡Mi poder era increíble!! Ahora, mataré a Espectro.

-¿Me vas a atacar a mí? No me hagas reír. No puedes- Dijo el. En eso, saca un control, y lo enciende. Mi cabeza estalló.

-¿Creías que no me daría cuenta que harías esto?- Dijo burlescamente Espectro- Te inyecté un controlador cerebral. A mi no podrás hacerme nada.

Mi cabeza retumbaba. Escuchaba como alguien, en mi mente, me decía “Mátalos. Ellos se creen mejores que tú. Demuéstrales quién es mejor. Y Dopamina será tuya”. Fue imposible rehusarse. Me aprestaba a matarlos, cuando entra Dopamina.

-¡Si los vas a matar, primero me tendrás que matar a mí!- Dijo la bella joven.

Otra vez apareció la voz en mi cabeza. Esta vez sus palabras fueron: “Mátala. Hay millones de mujeres esperando por ti. Ella no es nada. ¡¡Mátala!!”

Me apresté a atacarla, pero no pude. Algo me lo impidió. La voz gritaba cada vez más fuerte que la matara, pero no podía. Mi cabeza parecía que estallaría.

-Escúchame- Me dijo Dopamina- Debes luchar contra eso. Lucha contra Espectro, no contra nosotros, que te queremos muchísimo, que somos tus amigos. Tenía razón. Me dirigí hacia él, con intención de atacarlo. Espectro se defendió, pero yo era mucho más poderoso. Lo maté, pero al hacer eso, el efecto de las vibraciones nucleares se perdió, y volví a ser el mismo. Dopamina me acarició la cara. Me sentí mejor que nunca.

-Que bueno que volviste a ser tú- Dijo la hermosa mujer- Ahora, destruyamos este lugar y vámonos.

Y eso hicimos. Primero, exploramos el laboratorio. Fue increíble ver todo lo que hizo Espectro para llegar al resultado. Mientras lo hacíamos, escuchamos algo. Había llegando un mail para Espectro, de parte de “Los Filósofos”. Decía:

“Espectro. Esperamos que tu misión haya tenido éxito. Si no, nos veremos en la obligación de matarte. Sigue el plan tal y como lo acordamos, sin desviaciones. Esperamos tu respuesta.”

O sea, que no llegamos al fondo de esto. Que todo fue planeado por alguien más...

Capítulo 6

Volví a la cueva junto a Dopamina. No podía creerlo. ¡¡Estaba viva!! Me sentía bien conmigo mismo, por primera vez en mi vida. Llegamos a la cueva, en donde nos esperaban Gilder y John. Nuestra sorpresa fue doble al encontrarnos con Petit y Fernando, quienes lograron escapar. Pero en ese momento, sentí que mi corazón se rompía en mil pedazos. Dopamina corrió a abrazar a Gilder. ¡¡Eran novios!! No lo podía creer. Entonces, el diario que encontré en su casa. Ese soldado que se mencionaba, era él. Y la mujer de la que Gilder hablaba, era ella. Estaba atónito. No podía creer lo que veía. Sentí una tristeza absoluta. Había encontrado una mujer que fue capaz de entrar en mi corazón. La única en mi vida. Y resultó ser la novia de uno de mis mejores amigos. Estaba destrozado.

-¿Qué te pasa? –Me preguntó Petit.

-Nada –Respondí secamente.

-Mira. Si estás así por Dopamina, entiende que no eres el único. Yo también me siento muy atraído por ella. Y me propuse conquistarla.

Genial. Con eso, lo corono todo. Además de ser novia de Gilder, Petit esta también enamorado de ella. ¡¡¡La mierda!!! Con eso, ¿Qué posibilidad puedo tener yo? Gilder y Petit son unas grandes personas y espectaculares soldados. Ambos le pueden prometer un futuro espectacular, además de mucho amor. Yo solo puedo prometerle lo último. ¡¡¡Demonios!!!

Me sentí triste. Muy triste. Yo no podía competir contra ellos. Era como hacer pelear a un joven con el campeón mundial de boxeo. No tenía mayor chance. Me sentía ofuscado, impotente. Los veía, y me deprimía aún más.

-¿Qué vamos a hacer ahora? –Exclamó Gilder, luego de conversar, besarse y abrazarse un rato con Dopamina, mientras Petit miraba con recelo y yo con tristeza.

-¿Y que mierda crees? ¿Qué somos tus papás? Decide tú que harás… -Le dije.

-¿Qué te pasa? –Me respondió- ¿Acaso te hice algo?

-No. No me has hecho nada. Discúlpame –Le repliqué. Lo mejor era dejar eso de lado, y centrarse ahora en Espectro. –Creo que debemos ir a detener a Espectro. Dijo que estaría en el este de la ciudad- Tenía cuentas que saldar con él. No le voy a perdonar el haber encerrado a Dopamina. Esa me la va a pagar.

-Si, pero así como estamos, será imposible. Son muchísimos –Se quejó Petit.

-Petit tiene razón –Respondió Gilder. Fernando y John, que estaban malheridos, estaban durmiendo.

-¿Y? Si no nos morimos ahora, nos moriremos en un tiempo más. Da lo mismo. Hay que detener a Espectro, antes que gané mas poder –Dije como pretexto. No diría que solo quería vengarme por lo que le hizo a Dopamina.

-Tan negativo que eres –Me dijo Dopamina- Petit tiene razón, son muchísimos. Sería suicidio. Lo más recomendable es que pidan refuerzos.

-Las radios no funcionan. Estamos solos. Y no pienso quedarme aquí esperando a la muerte, prefiero ir a buscarla. Si quieren venir conmigo, bien. Si no, bien también –Exclamé, un poco arto de la situación. La verdad es que lo único que queria era salir luego de ahí, para evitar ver a Gilder y a Dopamina.

-Debemos esperar. Los refuerzos vendrán. A lo menos, esperemos hasta mañana – Dijo Petit.

La verdad es que me encontraba exhausto, aparte de herido debido a la pelea con Espectro. Consideré la idea, y me pareció que descansar y partir en la mañana era prudente.

-Yo haré guardia hasta que anochezca. De ahí, despierten a John y a Fernando, y que ellos hagan guardia –Dije. Tomé mi metralleta y fui a la entrada de la cueva, mientras Petit, Gilder y Dopamina se aprestaban a dormir unas horas. Ahí estuve, pensando. Me sentía resignado. El único sentimiento que tenía en mi era el de resignación. Resignación. Resignación. Hay veces en que hay que aceptar que definitivamente no puedes hacer nada. Las cosas se dan de una manera, y tu puedes intentar cambiarlas. Pero a veces, basta con mirar tu maldito escenario para darte cuenta de la cruel y dura realidad: las cosas son así, y no puedes hacer para cambiarlas. Puedes intentarlo, pero no lograras nada. Siempre tus esfuerzos se verán disminuidos o anulados por fuerzas de mucho, pero mucho mayor peso que la tuya. Son esas ocasiones donde simplemente te ves disminuido por fuerzas que son superiores a ti, en cualquier ámbito en el cual desees competir contra ellos. Por que ellos son algo que está más allá de tu capacidad como ser humano, sin dejar de ser, seres humanos. Pero son más que ti. Físicamente, intelectualmente, emocionalmente, etc, etc, etc. Y lo peor, es que esas personas son tus amigos. Te sientes espectacular por sus logros y sus habilidades, pero no puedes dejar de sentirte mal al ver que ellos, cuando quieren algo que tu quieres, siempre te ganarán. ¿Que haría una mujer, si tiene 3 posibles candidatos para ser su pareja? Elegir al que mas le guste. Y lógicamente, le gustará más el que mas cualidades tenga. ¿Que puedes hacer tú, si eres uno de esos candidatos, pero tus amigos tienen muchas mas cualidades y atribuciones de las que tu podrías llegar a tener? Te sientes feliz por ellos. Muy feliz.

Pero, nadie te puede quitar ese malestar. Más que malestar, es una sensación de que esa mujer es un objeto inalcanzable. ¿Que puedes hacer tú, si tus amigos tienen miles de cosas mas para ofrecerle de las que tienes tú? ¿Que puedes hacer si esa mujer se siente atraída por uno, y el otro también está intentando lo mismo? ¿Como hacer que alguien cambie algo de buena calidad a algo de calidad regular o mala? ¿Como hacerle entender a alguien que cambie lo bueno por lo no muy bueno? No tiene ninguna lógica... Nadie lo haría. Y nadie nunca lo hará jamás. ¿Que te queda a ti por hacer? No mucho... Prácticamente nada más que agachar tu cabeza y observar la felicidad que irradiarán esas personas cuando estén juntas, mientras tu, desde un punto x en el espacio donde ellos no pueden verte, observas, y te sientes feliz por ellos, por que ambos son amigos tuyos. ¿Pero que pasa contigo? Simplemente sigues tu maldita vida, aceptando una vez mas tú derrota, y marchándote como un buen soldado que se dio cuenta que ha perdido la guerra.

Y con ese pensamiento, llegó la noche. Desperté a John y Fernando para el relevo. Me fui a dormir. Antes de dormir, recordé en la pelea con Espectro. Y entonces, una aterradora idea cruzó mi mente…

Capítulo 5

Al llegar a la casita abandonada, no había nadie. Aún no anochecía, por lo que decidí esperar a mis amigos, que quizás aún investigaban la ciudad. Mientras esperaba, pensaba en lo que acababa de ver. Aquel cuerpo que irradiaba ese odio, ¿era de un humano? ¿Es posible transmitir sentimientos después de muerto? Siempre fui creyente solo de lo que puedo ver y tocar, por tanto me pareció una idea absurda. ¿Pero como era posible? Bastaba ver la expresión de sus ojos, para sentirse profundamente odiado. Y el otro cuerpo… ¿Quién podría haberle hecho eso? Matarlo de esa manera, y encima escribir con sangre esa frase. Sentí que había algo mucho mas profundo que una guerra. Quizás alguna especia de enfermo mental. Pero… ¿Uno? Difícil. Estaba inundado en preguntas, y buscando su respuesta, solo llegaba a más interrogantes. En eso, siento que abren la puerta de la casa. No podía estar seguro si eran mis amigos, por lo que tomé mi M-16 y me camuflé. Entraron a mi habitación. Lo que vi en ese momento, no lo olvidaré jamás. Era un “ser” idéntico al cadáver que encontré en ese sótano. Su cara irradiaba un odio indescriptible. Eran idénticos al humano, excepto por una capucha, una arma bastante extraña, y su expresión. En sus brazos cargaba un cuerpo. Lo dejó en el suelo. Miré el cuerpo. ¡¡Era John!! Salí de mi escondite, y, apuntando a la criatura, le dije que se mantuviera quieto. Comenzó a reírse de una manera bastante tétrica. Me miró a los ojos, y dijo que no creía que hubiera nadie más que aquellas “cuatro moscas” que habían encontrado. Esas cuatro moscas sin duda debían ser mis amigos. Le pregunté que les habían hecho y donde estaban. Rió nuevamente, y respondió que ellos ahora “están en excelentes manos”. Y en eso, me apuntó con su arma, que era una especie de tubo conectado a la cabeza de este “ser”. El “tubo” comenzó a encenderse. Comencé a sentir una espectacular fuerza que fluía por mí. De pronto, sentí como mi sangre prácticamente hervía. Sentía un odio indescriptible. Comencé a despreciarlo todo. En eso, John, que aún estaba vivo, se levanta y apuñala en la cabeza al ser. El ser exclama que por fin encontraron al sujeto para completar el ejército, y cae al suelo, aparentemente muerto. En eso, por radio dice que lo encontró. John, que estaba claramente malherido, lo patea para matarlo definitivamente. La extraña sensación de odio, pero a la vez de poder, desapareció. ¿Qué demonios intentó hacerme ese ser? John me preguntó si estaba bien, a lo cual respondí que sí. Me dijo que estaban en la casa, cuando aparecieron, de la nada, 4 de esos seres. Como los mejores espías, habían entrado a la casa sin que los escucharan, y los capturaron a todos. Los sedaron, y los llevaron quién sabe donde. Por algún motivo, aquel ser se devolvió a la casa. Y por eso había llegado el monstruo con el aquí. Yo escuchaba, pero no razonaba las palabras de John. Seguía dándome vueltas aquella sensación. Ese poder indescriptible. Ese odio que me hacía sentirme completo. Me hacía sentirme capaz de ganarle a cualquiera, incluso a mis amigos genios Gilder y Petit. Quería experimentarlo nuevamente. John me propuso que fuéramos de inmediato a la busqueda de nuestros amigos. Respondí que sí, y ambos salimos a buscarlos. Nos separamos, y acordamos juntarnos al amanecer en una cueva a 15 kilómetros de la casa, puesto que ya no era segura. John iría a la zona central de la ciudad, mientras que yo iría al oeste, por que el dijo que recordaba haber escuchado hablar a los monstruos sobre el oeste de la ciudad antes de sedarse completamente. Eran más de 30 kilómetros de viaje. Me preparé, y me dispuse a ir a investigar el lugar.

Al llegar, noté de inmediato la presencia de esos “seres” en los alrededores. El olor a sangre del lugar era impresionante. Sigilosamente, comencé a recorrer los edificios del sector, todos destruidos, y algunos totalmente derrumbados. Mi mente estaba dividida en dos. Por un lado, solo quería salvar a mis amigos. Ellos no podían morir. Y por otro lado, la sensación de poder que experimenté con el arma de aquel ser. Quería sentir esa sensación nuevamente. En eso, escucho a dos seres acercarse. Me escondo, y los escucho atentamente. Hablaban de una chica, que por órdenes superiores, no podían tocar por nada del mundo, y de un hombre llamado Gilder, que estaba prisionero en el cementerio, a 2 kilómetros de donde estaba ubicado. Con que Gilder esta vivo. Me dispuse a ir al cementerio. En el camino, aparte de ver a muchos de esos seres, vi como algunos usaban su arma contra algunas personas, las cuales emitían gritos de desesperación, de un dolor indescriptible. Luego, su cara se desformaba horrendamente, y caían muertos, sin piel y con sus órganos totalmente a la vista. Su sangre comenzaba a salir a chorros de todo el cuerpo. Con que esos son los efectos del arma. ¿Pero por que a mí no me hizo eso? ¿Por qué parecía que a mi me hacía mas fuerte? Preferí no pensar en eso. De paso, eso me explicó como murió el hombre del sótano. Llegué al cementerio. Comencé a infiltrarme lentamente, hasta llegar a lo que parecían ser una especia de celdas. Comencé a buscar a mi amigo. En el camino, observé las otras celdas. Todas tenían cuerpos horrendamente destruidos por las armas de esos seres. Otros, al parecer, no aguantaron y se suicidaron. Casi en el final de las celdas, encontré a Gilder. Estaba inconsciente. Abrí la celda, lo reanimé, le expliqué la situación, y le dije que debíamos salir de ahí lo más pronto posible. Gilder me agradeció de corazón por rescatarlo, y me dijo que no soy tan frío ni indiferente como todos piensan. Le dije que solo lo salvé por que no podía hacer la misión solo, que necesito refuerzos, en especial a alguien tan brillante como él. Gilder dijo que yo era muy bueno para usar pretextos. No supe que rayos quiso decir con eso. Cuando íbamos saliendo, los seres nos estaban esperando. De entre todos, destacaba uno. Era casi humano, excepto por su estatura. Media tres metros, y su cara reflejaba un odio inmenso, muchísimo más grande que cualquiera de los otros seres. Se acercó. Lo apunté con mi arma. En eso, el ser exclama:

-¿De verdad me dispararás? ¿Tienes las agallas para hacerlo?

Sentí eso como una ofensa. Con toda mi fuerza, jalé el gatillo de mi metralleta. Las balas comenzaron a salir. Pero pasó algo increíble. Todas las balas parecían desviarse. Ninguna dio en el blanco. El ser gigante rió profundamente, y exclamó:

-Tus balitas no me hacen nada. Tú vendrás conmigo, y dirigirás mi ejército. Pero antes, déjame presentarme. Me llamo Espectro. Por fin encontré un soldado con las características que buscaba. Ahora ya nadie puede detenernos.

No sabía de qué demonios estaba hablando ese ser.

-No se a que mierda te refieres con eso-le dije- Pero no dirigiré ninguno de tus ejércitos. Ahora, mas te vale dejarme pasar, a no ser que quieras que me enfrente a todos.

-¿Tú? ¿Contra todos nosotros? No. No es necesario. Solo te enfrentarás a mí.

¡¡Soldados!! –Exclamó, dirigiéndose a todos los otros seres- retírense. Al instante, todos los otros monstruos se fueron, dejándome solo con Espectro y Gilder que, sentado y malherido, solo observaba la escena.

-Ya viste que las balas no tienen efecto en mí –Comenzó diciendo Espectro- así que será un combate cuerpo a cuerpo. Aunque si quieres disparar, hazlo. Solo malgastarás balas.

No tenía opción. Debía matarlo si quería salir de ahí. Le dije a Espectro que dejara irse a mi amigo. No opuso resistencia. Le entregué mi arma, y le indiqué donde estaba la cueva. Gilder se fue. Solo quedaba yo y Espectro. El ser rió profundamente, exclamó que esto sería muy entretenido, y comenzó su ataque. Además de ser muy alto, tenía una fuerza extraordinaria, y una agilidad impresionante, sobre todo para su altura. Yo apenas si podía repeler sus golpes, y no atacaba.

-Vamos. Seguro que puedes pelear mucho mejor que eso –Dijo Espectro

La verdad es que no podía. El era demasiado poderoso.

-Si no me derrotas, daré la orden que maten a Dopamina –Exclamó el monstruo

En ese momento, me paralicé. Dopamina, la mujer por la cual estoy acá, la que me quita el sueño, en la que pienso todo el día y noche. Con que estaba viva. Y está aquí.

-Si la mato, seguro que me odiaría, ¿cierto? –Dijo el ser

-Te odiaría con toda mi alma, maldito. Más te vale no ponerle un dedo encima.

En eso, Espectro deja de atacar. Emite un sonido, y aparecen dos de los seres más pequeños, con una gran jaula, y dentro de ella, la bella Dopamina. Estaba viva. Los seres se retiraron. Espectro abrió la celda, y comenzó a toquetearla. Pasaba su larga lengua por la cara de Dopamina.

-Que desperdicio –Dijo- que una mujer tan bella deba morir.

No lo permitiría. El odio a Espectro comenzó a apoderarse de mí. Lo ataqué sin pensarlo, hiriéndolo. El monstruo sonrió, y exclamó:

-Perfecto. Deja que tu odio se apodere de ti. ¡¡Atácame!!

No lo pensé. Continué con mi ataque. Espectro no se defendía. El odio tomaba posesión de mi cuerpo. Mis ataques cada vez eran más violentos. En eso, Espectro me apunta con el “tubo”

-Creí que esto era sin armas –Le dije.

-Lo es. Veremos que tal te sientes ahora- Y el tubo se encendió. Nuevamente sentí la sensación de poder, de ese odio eterno, dentro de mí. Sentía poder, mucho poder. Ataqué al monstruo, hiriéndolo gravemente. El tubo se apagó, y dejé de sentir esa sensación.

-De verdad que tú eres a quién buscó –Comenzó diciendo Espectro- Recuerda esa sensación. Por ahora, los dejaré que se vayan. Tu fuerza es más grande de lo que pensaba. Si quieres, llévate a la chica. Te estaré esperando en la zona este de la ciudad. Reagrúpate con tus amigos, y ve a buscarme. Esperaré con ansias nuestro encuentro. Hasta ese momento, ódiame. Nos veremos pronto.

Y el monstruo desapareció…

domingo, junio 22, 2008

Capítulo 4

Al despuntar el alba, ya estábamos todos listos para partir a nuestra nueva misión. Fuimos 5 soldados elegidos para tan importante compromiso: Gilder, Petit, un soldado que era de nuestro pelotón llamado Fernando, un soldado que estaba en la base llamado John, y yo. Fuimos al hangar para que fuéramos llevados aéreamente a nuestra ciudad, y ahí comenzar la infiltración. En el camino, nadie comentó nada. Todos estábamos silentes, esperando el momento para descender del helicóptero. Llegamos a los 30 minutos de viaje. Nos preparamos, y descendimos. Estábamos nuevamente en tierra hostil. Por lo amplio del terreno, lo más conveniente era separarnos. Acordamos que al caer el anochecer, nos reuniríamos en una casa abandonada a 2 km del lugar donde descendimos. La idea de andar solo no me agrada mucho. No se que es lo que haré si tengo que tomar una decisión importante, o hacer algo que valga la pena. Pero que va. Si la misión sale bien o sale mal, me da lo mismo. Pero de pronto, al pensar eso, recordé a esa persona. A esa persona que me quitó el sueño la noche anterior y que me brindó una fuerza que jamás había experimentado. Y la misión dejó de serme indiferente, y sentía reales deseos de dar lo mejor de mí, aunque fuera una miseria. A mi me tocó inspeccionar la villa donde me crié, y donde vive esa persona. Fue un golpe de suerte. Solo quería encontrarla sana y salva. No tendríamos comunicación entre nosotros, por lo tanto no sabría nada de mis compañeros hasta llegar el anochecer, si es que vivía.

Caminé alrededor de 7 kms antes de encontrarme con la entrada a la villa. Estaba totalmente destruida, y parecía un lugar muy tétrico. Algo en ese lugar me daba mala espina. Se me erizó hasta el último pelo de mi cuerpo. Cuando comencé a inspeccionar el lugar, me di cuenta que algo raro había pasado. No había ningún habitante en la villa, pero tampoco encontré los cuerpos de nadie. Esperaba encontrar a alguien que me guiará, pero nada. Solo polvo, sangre, muebles destruidos y casas que podían caerse en cualquier momento. Revisé cada una de las casas en busca de pistas, y en cada casa notaba distintos detalles. En una casa, encontré un peluche que aparentemente fue acuchillado, por que estaba totalmente rajado. Pero lo curioso era que tenia sangre. Sentí escalofríos. ¿Con que propósito alguien podría haber hecho eso? En otra casa, encontré restos de lo que parecían ser huesos, pero humanos, cortados, al parecer, con mucha dedicación. Algunos tenían marcas de colmillos, y sangre. Cada momento todo se tornaba más tenebroso y misterioso. En otra casa, encontré lo que parecía ser un pequeño altar, con un libro totalmente manchado con sangre, un símbolo extraño pintado en la pared, un cuchillo y una rosa. Quién sabe para que demonios usaron eso, y tampoco quise quedarme a tratar de averiguarlo. En otra casa, encontré montones de jaulas lo suficientemente grandes como para refugiar a un perro de tamaño “normal” en su interior. Todas estaban abiertas, y llenas de sangre. Emitían un olor repugnante. En otra casa, encontré montones de fotografías de niños jugando. Al lado de las fotografías, un dibujo hecho a mano de una hoguera, y en su interior niños quemándose. Me estremecí. Cada vez entendía menos que ocurría, que ocurrió, y que eran todas estas cosas extrañas que encontraba en esas casas. Pero lo peor estaba por venir…

Llegué a la casa de “esa persona”. Dentro de la casa, encontré un pasaje subterráneo que me condujo hasta una pequeña habitación con una vela casi agotada. Dentro de la habitación encontré un diario de vida encima de una cama muy desarmada y con manchas rojas, que aparentemente era sangre. Dentro del diario, que al parecer era de ella, se relataban algunas cosas que habían ocurrido en la ciudad. En el último escrito, que era de hace tres días, decía: “Estábamos tranquilos en mi casita del árbol, cuando sonó el estruendo de una bomba. Yo estaba pensando en mi querido soldado que se marchó a la guerra. Toda la gente corría en pánico, cuando bajaron aquellos “seres”. No soy capaz de describirlos como humanos, por que no lo eran y tampoco lo parecían. Lucían una especia de capucha en la cara, una cara horrenda, llena de odio y venganza. Traían consigo armas que yo nunca había visto en mi vida. Dijeron que no querían matar a nadie, que por favor nadie se resistiera a ser arrestado. Mi vecino, Juan, dijo que ellos no eran nadie para quitarnos nuestra libertad, y se opuso al arresto. Los “seres” lo tomaron, y se lo llevaron a un camión. Lo único que se escucharon fueron gritos incesantes. Gritos de desesperación, de dolor, de un terrible sufrimiento. De pronto, por la puerta del camión salieron los seres, arrastrando una bolsa. Dijeron que Juan fue dado de “baja”, y que el próximo que se opusiera sufriría las mismas consecuencias. Nadie dijo nada, y fueron todos arrestados. Yo me oculté en el pasaje subterráneo que construyo para mí mi amado soldado, meses antes de irse a la guerra. Aquí llevo todo el día. No se que estará pasando afuera. Escucho mucho movimiento. Alguien entró a la casa. Se escucha como destruyen todo. Al parecer me están buscando. Estoy sola… Nadie me puede proteger. ¿Será mi fin? Estoy desesperada. ¡¡Han entrado en el pasaje!! Se escuchan sus horrendas voces. Sus pasos endemoniados. Están golpeando la puerta. Van a entrar. No quiero morir. Si puedes leer estás últimas palabras, por favor, haz algo por esta ciudad. Te lo imploro. ¡¡Ayúdame!! ¡¡Ayúdame!! ¡¡Ayúda…” La escritura parecía haber sido abruptamente cortada. El lápiz con que fue escrita estaba encima, y partido en dos. No sabía si ella estaba viva o no. Lo que sí sé, es que esos “seres” como los nombra se la llevaron, y no se donde. Decidí que terminaría de inspeccionar la villa, y volvería al punto de reunión. Ninguna otra casa presentaba detalles como los anteriores, pero si todas tenían evidencia que ahí hubo mucha violencia, y probablemente más de una muerte, por que había sangre por todos lados. En la última casa que encontré, también encontré un pasaje secreto. Descendí por las escaleras. Y descendí, y descendí, y seguí descendiendo. Parecían no tener fin. En un momento, la luz natural no llegaba, y tuve que sacar mi linterna. Avancé con más cautela. Las escaleras seguían en descenso. Parecía ser que alguien quería llegar al infierno. Llegué al final, y noté en el piso papeles esparcidos en el suelo, todos con escritos. Algunos decían “MuErTe PaRa Mi… FeLiCiDaD pArA eL rEsTo!!” Otros simplemente tenían garabatos imposibles de leer. Pero uno de ellos era mucho mas extenso, y decía: “Aquí nunca me encontrarán. Me refugiaré aquí unos días, hasta que se vayan. Estoy solo. Nadie me puede ayudar. Estoy herido. ¿Será una pesadilla? ¿Será real? Todo parece una pesadilla. Todo parece un sueño… Nada es real, excepto el dolor. Escucho pasos. Se acercan. Es mi fin. Voy a morir aquí. Jamás me perdonarán el hecho de haber matado a uno de esas criaturas. El dolor se agudiza. Apenas puedo seguir escribiendo. Estoy llorando. Este es mi fin. Nunca pensé morir así. Solo. Apenas me puedo mover. Detrás de esa puerta, esta el cuerpo de la criatura. No se realmente que son. Idénticos a nosotros, idéntico al humano. Sin embargo, tienen algo extraño. Su cara irradia un odio más allá de nuestra comprensión. Los pasos se escuchan más fuerte. Voy a morir, eso es seguro. Quién sabe que será de mi cuerpo. Escribo esto, con la esperanza que alguien lo lea. Espero que esa persona no abra la puerta, a no ser que tenga nervios de acero y se crea preparado para ver cosas espeluznantes. Los pasos están cada vez mas cerca… Se acercan… Se acercan… Se acercan… Esto es el fin. Ahí vienen. Caminan lento, y se ríen. Parecen disfrutar este momento. Me están mirando. Ese odio que emiten, esa frialdad de su mirada… Me da escalofríos. Me están apuntando… Van a disparar. Adiós…” Sentía como la sangre corría por mis venas. ¿Qué demonios ocurrió aquí? Dudé si abrir la puerta. Pero lo hice, y lo que vi, me hizo arrepentirme de mi decisión. En el interior había dos cuerpos. Uno tenía la cara deformada, pero se podía observar un odio penetrante en su mirada que me hizo temblar. Y en el fondo de la habitación, otro cuerpo. Estaba colgado al revés, y parecía que lo habían “deshollejado” por completo. Se podían ver sus órganos. La piel estaba cortada en trozos y esparcida por todo el suelo. Detrás del cuerpo, había un gran escrito con sangre que decía “LA MUERTE ES DELICIOSA. EL SUFRIMIENTO… EXQUISITO”

Capítulo 3

Petit me despertó al amanecer. Me dijo que Gilder observó un ejercito grande que se acercaba, y que debíamos partir de inmediato para llegar a la base a avisar. Me levanté, y emprendimos camino. Era un día lluvioso. Muy lluvioso. Nuestra ropa estaba totalmente empapada, y nuestras botas llenas de agua. Al cabo de una hora, llegamos a la base. Dimos nuestro reporte al coronel de turno, y nos pasó una habitación para poder descansar y recuperar fuerzas. Gilder y Petit aprovecharon esa instancia para enviar cartas a sus seres queridos, y llamar por teléfono. Como yo no llamé a nadie, ni tampoco escribí nada, fui a enviar la carta que Dante me entregó para su mujer. En eso, me topo con un viejo compañero de pelotón que luego fue enviado a otra base, Gerardo. Gerardo era un tipo derecho, que jamás tenía miedo de decir la verdad. Éramos amigos desde el colegio, y por lo tanto, el verlo me dio un rato de familiaridad. El se alegro mucho al verme con vida. Charlamos un rato. Me contó que el próximo mes se casaría con la mujer que, para el, “simplemente le arrebató el corazón”. Me sentí feliz por el, y de inmediato pensé que era alguien mas valioso que mi, puesto que tenia a alguien a su lado. Me invitó a su fiesta de boda, y yo acepté a ir, siempre y cuando saliera vivo de esta guerra. Gerardo rió y dijo “¡¡por supuesto que saldrás vivo!!”. Derrochó un optimismo similar al que mostraban Petit y Gilder, y yo no lo entendía. Estamos en desventaja, se acerca un ejército a atacarnos… ¿Cómo pueden mantener el optimismo? No lo entendía. De pronto, sonó la alarma. El enemigo se acercaba. Todos fuimos a nuestros puestos. Yo quedé separado de mis amigos. Ellos estaban en la defensiva aérea, y yo estaba en la defensiva frontal. Fue una cruda batalla. Cada soldado que moría era prueba de una nueva victoria de la guerra. Cada bala insertada en el cuerpo de una persona (aliado o enemigo) mostraba la crueldad y lo despiadado que podía ser una persona. Cada granada mostraba la excitación al encontrarse en esa situación. Cada detalle de la guerra confirmaba más la teoría de que el hombre es un maldito sadomasoquista que disfruta con el dolor ajeno. Luego de una ardua lucha, logramos repeler el ataque. Pero cuando todo parecía calmarse, se escuchó un disparo en el sector de las defensas aéreas. Yo recordé que mis amigos estaban ahí, y corrí de inmediato a ver que sucedía. Cuando llegué, vi algo que me paralizó el cuerpo. Petit estaba herido en el brazo, y Gilder estaba siendo amenazado con una pistola en la cabeza por un soldado enemigo. Entré en la habitación, dispuesto a salvar a mis compañeros. El enemigo me apuntó. No retrocedí. Sabia que, si alguien debía morir ahí, debía ser yo. Era el que menos valía en esta tierra. El soldado se acercó a mí, y me apuntó con el arma en mi dañado cráneo. Yo estaba desarmado. Luego, apuntó a Petit, y exclamó “Este será el primero…”, y se aprestó a jalar el gatillo. Yo no lo iba a permitir. Petit tenía una proyección enorme, era una gran persona, gran soldado, y no podía morir antes que yo, que no valía mucho. Puse mi mano en el agujero por donde sale la bala, y comencé a luchar contra el soldado enemigo. En eso, el soldado dispara, penetrándome la mano con el balazo. Gilder, al ver que yo estaba en peligro, arriesgo tontamente su vida lanzándose sobre el enemigo, quitándole el arma. Lo amenazó, y le dijo que quedaría como prisionero de guerra. Yo encontré esa idea la más absurda del mundo. Había que darle muerte de inmediato. Era un enemigo. Pero Petit y Gilder no encontraban el motivo de matar a alguien sin motivo. Yo sí. Era el enemigo. Ese hombre nos iba a matar sin remordimiento, pero sin embargo ellos lo dejan vivir. No entiendo en que demonios están pensando.

Pasada la batalla, yo y mis amigos fuimos al médico a curarnos de nuestras lesiones. Aproveché de preguntar a Gilder por que hizo esa tontería de saltar encima del enemigo, sabiendo que este lo podía matar de inmediato. Su respuesta fue “te vi en peligro, y no quiero que nada malo te pase”. Yo le dije que eso era absurdo, que el debía privilegiar su bienestar o el de Petit, puesto que ellos tenían mayores proyecciones y eran mejores soldados. Gilder simplemente se echó a reír y dijo que yo estaba loco. Yo me reí con el, solo para no llevarle la contraria. Consideraba bastante tonto su argumento, de mucho menos peso que el dado por mi persona. Es ilógico. ¿Por qué alguien debería arriesgar la vida por otra persona que será “peor” que ella? ¿Por qué ese afán de salvar vidas, cuando no las valen? ¿Por qué ese estúpido pensamiento de querer salvarme, si valgo menos que ellos? ¿Acaso no se dan cuenta? ¿Deberé decírselos? ¿O simplemente quieren ser recordados como héroes? O quizás Gilder quería ser el que capturara al enemigo, para llevarse el crédito el. No podía permitir que alguien inferior como yo hiciera algo que el no pudo. Probablemente era eso. Pero yo simplemente quería que ellos vivieran, por que valen más. No me cansaré de decir eso. La gente que vale menos (como yo) debe proteger a la gente mas valiosa (Petit o Gilder), por que ellos serán mas aporte para el mundo de lo que puede serlo uno. Pero la gente siempre ríe cuando yo expreso esa idea, siendo que es muy cierta. Es como cuando vas a comprar algo. Lógicamente eliges lo mas bueno. Esto es lo mismo. Hay que elegir lo mas bueno, lo que pueda rendir mas y ayudar mas, no la escoria del planeta que lo único que hace es ocupar espacio y respirar aire valioso para otras personas.

Al salir de la enfermería, el coronel de turno nos informa que hemos sido seleccionados para una nueva misión. Debemos volver a nuestra ciudad de origen, que fue atacada y tomada por el enemigo, y recuperarla. Debemos infiltrarnos y sacar toda la información posible para hacer un ataque fugaz y recuperar la ciudad en el menos tiempo posible. Partiríamos a la madrugada del día siguiente. Fuimos a preparar nuestro equipamiento, y mientras lo hacíamos, Gilder comentó que ojala su amada siguiera viva. Que no sabe que hará si la muerte se la ha llevado. Yo le dije que simplemente seguir con su vida, que no se puede echar a morir por una simple persona, si hay miles de personas iguales en la tierra. Me miró con cara de sorpresa, y no emitió ningún comentario. Petit, por su parte, pedía que su familia estuviera con vida. Yo, la verdad, no pedía nada. Si había gente con vida, bien. Si no, bien igualmente. Pero de pronto, pensé en esa mujer. En esa misma mujer que me quita el sueño en la noche, y esa misma mujer de la que Dante habló antes de morir, por que yo se lo había comentado antes. Y por algún motivo, me dolió mi estómago, e inconcientemente deseaba que esa persona se encontrara a salvo. Que nada malo le haya ocurrido. Pero una sensación de odio me invadió fuertemente al pensar que el enemigo quizás algo le había hecho. Y tuve un especial interés en la misión, un interés que nunca había tenido por ninguna otra misión que haya hecho antes. Y una fuerza desconocida invadió todo mi cuerpo, de pies a cabeza. No era odio, por que yo lo hubiera sentido. Era una fuerza extraña, reconfortante, cálida, que jamás había sentido en mi vida. Y esa fuerza, a la vez, me dio una tranquilidad y una paz que no había experimentado nunca en mi vida. Y con esa extraña sensación, fui a dormir, pensando en la misión del día siguiente, y rogando por que esa fuerza tan reconfortante y hermosa no desapareciera. Y, dentro de mí, existía un ruego por que esa mujer, por la cual me siento atraído, estuviera viva. Era la única cosa que podía pedir…

martes, mayo 20, 2008

Capítulo 2

La mañana siguiente se presentó con un sol radiante y cálido, que hizo olvidar la fría noche que habíamos pasado. Petit y Gilder coincidían en que era un regalo de Dante. Para mí, el día era igual, puesto que todos los días eran iguales. El calor o el frío me eran indiferentes. Gracias a la tregua de la noche anterior, logramos escapar del búnker y refugiarnos en una pequeña habitación de lo que parecía ser un hotel en ruinas. Decidimos la vigilancia, y nos dispusimos a dormir. Yo vigilé primero. Mientras Petit y Gilder dormían, yo estuve observando el búnker mucho tiempo. Pensaba mucho en las palabras de Dante. ¿Puedo cambiar mi vida? ¿Es posible comenzar de nuevo? ¿De verdad tengo tantas cosas como dice él, pero que no puedo verlas? Al mirarlas simplemente, solo me tengo a mí, a la guerra, a mis compañeros de guerra. Mi familia no me interesa mucho, y no hablo mucho ni salgo con mis amigos, por que no tengo ánimos. Además, la mujer de la que hablaba Dante, que me ha quitado el sueño por que me siento atraído por ella, no la he podido ver hace un par de días. Pero ella debe tener mejores “candidatos” que yo, un pobre y miserable ser errante que no vive por nadie ni por nada, y que no tiene nada que ofrecerle a una grandiosa mujer como lo es ella. Pasaron las horas, y decidimos avanzar en nuestra empresa de tratar de huir de ahí. Yo no había dormido nada en dos días, pero no me sentía cansado. Caminamos durante todo el día, mientras Petit y Gilder hablaban de lo que harían cuando saliéramos de allí. Gilder tenía planeado pedir la mano de la mujer que le roba el corazón, mientras que Petit pensaba esforzarse al máximo en sus estudios, y, por que no, encontrar una linda mujer con la cual compartir el resto de su vida. Yo, una vez más, caminaba silente, sin nada que contar. Pensaba como era posible que piensen en que harán cuando salgamos, si aún no salimos. Estamos atrapados aquí, en esta tierra desconocida, con pocas municiones y provisiones, con ejércitos enemigos completos merodeando las zonas. Y se los comenté. Pero ellos recurrieron a su estúpido optimismo para decirme que si saldremos, y que debemos tener fe en que las cosas saldrán bien. Yo les dije que el optimismo es una falsa ilusión para mantener la esperanza de algo que se ve mal, y que no parece querer pintar mejor. La vida me enseño que el pesimista es un optimista, pero que tiene experiencia. En realidad, no me lo enseño la vida. Siempre he sido una persona pesimista, por eso quizás nunca me decepciono por nada. Ellos me respondieron que necesito ser más optimista en la vida. Yo no los escuché, por que odio que me digan lo que debo hacer o como ser. ¿Qué se creen? ¿Dueños de mí? ¿Se creen con el poder para decirme eso, por que no soy igual a ellos? Que equivocados están. Seguimos nuestra caminata, hasta que llegó la noche, y con ella, la lluvia. El terreno se volvió demasiado oscuro y peligroso para avanzar, por lo que buscamos una pequeña casa destruida, y nos refugiamos. Al entrar, nuestros ojos vieron unas de las escenas que nos marcaron de por vida. 3 niños, horriblemente asesinados a sangre fría por nuestros compañeros de lucha, nuestros “amigos”. Encima de ellos, la mamá tenía el cuerpo con mas de 35 agujeros, lo que hacia pensar que le dispararon a quemarropa mas de 35 veces. Al parecer, trató de proteger a los niños, por que presentaba múltiples golpes en su destruido cuerpo. Los niños fueron baleados y golpeados con la misma brutalidad. Los cuerpos aún emitían un fuerte olor a pólvora, producto de los múltiples disparos que recibieron. Petit no cabía en si. No podía creer que nuestros propios compañeros hayan cometido semejante atrocidad. Gilder solo observaba en silencio, mientras derramaba lágrimas. No entendía su malestar o pena. Esa gente no es ni de nuestro “bando”, ni tampoco la conocemos. No tienen ninguna relación con nosotros. Al menos, eso pensaba yo. Sin embargo, algo me perturbaba, y me deprimía fuertemente. De pronto, lloré. No entendí por que, pero mis ojos se llenaron de lágrimas. Durante toda esa fría y lluviosa noche, lloré. Lloré hasta que mis cansados ojos no fueron capaces de emitir otra maldita lágrima, signo de debilidad y que debía eliminar de inmediato. Me levanté. Noté que ya había luz, y que dejó de llover. Desperté a mis compañeros, y emprendimos de nuevo el viaje. Era muy difícil avanzar, por que no sabíamos si habían enemigos. De pronto, recibimos un mensaje por radio. Era el cuartel general. Nos preguntó posición. Se la dijimos. Nos dijo que a 59 kilómetros al este de donde estábamos, se había tomado una base enemiga. Que ahí podíamos descansar y abastecernos. Decidimos caminar ese largo camino. Estábamos exhaustos. Al caer la noche, nos encontrábamos, según los cálculos matemáticos de Petit y Gilder (que en ninguna misión ni guerra han fallado), a 25 kilómetros de la base. Decidimos descansar en un edificio en ruinas que se encontraba cerca de nosotros. No encontramos camas, pero si muchos muertos, entre ellos niños, mujeres e incluso bebés. Petit se quejaba, al mismo tiempo que sus ojos se llenaban de lágrimas, de lo cruel que era la guerra, que los únicos que deberían morirse eran los culpables de la misma. Gilder consolaba a Petit, mientras decía que su sueño era un mundo sin guerras. Yo, una vez más, no tenía comentarios. Dormimos. Esa noche, tuve un sueño muy extraño. Soñé que me encontraba en un campo de guerra, lleno de soldados muertos, donde yo era el único sobreviviente, aparentemente. De pronto, tres soldados comienzan a levantarse. Cuando veo sus rostros, me invadió una alegría inmensa, como nunca lo había sentido en mi vida. ¡¡Eran Dante, Petit y Gilder!! Corrí a abrazarlos, y ellos corrieron hacia mí. De pronto, se escuchan tres disparos. Mis amigos se detienen, y a los segundos caen, muertos, por una bala. Me enfrié completamente. Mis ojos se llenaron de esa sustancia de debilidad llamada “lágrima”. Corrí a verlos, pero estaban muertos. Los abrasé, mientras lloraba desconsoladamente y me preguntaba por que ellos, y no yo, que era el menos importante. De pronto, sus cuerpos se volvieron cenizas, que se escurrió entre mis manos hasta que no tenía ni un solo gramo en mis manos. Caí en ese campo de batalla, abatido, sin ganas de luchar. Mis ojos estaban completamente rojos e inundados de la “sustancia débil”. Me sentía raro, me sentía encolerizado de no poder hacer nada, y de que hayan sido ellos en lugar que yo. Mientras lloraba, recordaba todos los momentos felices que habíamos pasado, y me di cuenta que para mi eran importantes. Luego, observé que alguien venia. Me paré. No me dijo su nombre. Estaba completamente vestido de blanco. Solo me dijo que mis amigos, a pesar de estar muertos, están felices. No por que se fueron de ese lugar, y no por que murieron, si no por que yo estoy vivo. Yo quedé atónito, y no di crédito a lo que escuchaba. El hombre de blanco agregó, antes de desaparecer, que a veces los sueños se hacen realidad. Y que si en el sueño mis amigos eligieron dar su vida por mí, quizás en la realidad también podían verse enfrentados a una situación así. Yo le respondí que eso era estúpido, que ellos tienen mejores expectativas de vidas que mi, y no arruinarán su futuro por un pobre diablo como yo. El hombre de blanco sonrió, y agregó que esa opinión es de una persona a la cual le falta un elemento muy importante. Yo estaba a punto de preguntar que era, cuando desperté. Mis ojos estaban llenos del “líquido débil”. Mis compañeros seguían durmiendo. Decidí hacer guardia hasta el amanecer, pensando en el sueño, y reflexionando sobre que elemento era el que me faltaba. Y luego, con ese pensamiento, el cansancio se apoderó de mi cuerpo hasta que caí dormido nuevamente, con una extraña sonrisa en mi cara, pensando que ese elemento era innecesario. No sabía que tan equivocado estaba…

Capítulo 1

"Recuerdo que estabamos todos de vacaciones, cuando estalló la guerra. Me contraba en mi nueva casa, viviendo solo y alejado de todos. Me gusta mi privacidad y la soledad, me deja pensar tranquilo. A veces visitaba a mis amigos o a mi familia los fines de semana, pero mas contacto que ese con otras personas, no tenia. Y era algo que me gustaba. No tenia intención de encontrar pareja, puesto que ya llevaba mas de 30 años de mi vida en soledad, y me habia acostumbrado completamente, a la misma vez que me habia resignado a tener descendencia. De pronto, sono mi teléfono. Era el general. Me dijo que debiamos presentarnos en una hora en el cuartel, puesto que comenzó la guerra. Me levanté, me duché rápidamente y me puse mi uniforme. En 20 minutos estaba en el cuártel. Seriamos el pelotón de avanzada, atacariamos primero. A los minutos luego de que llegué al cuartel, aparecieron mis amigos Petit, Dante y Gilder. Petit era un gran soldado, un espectacular visionario de guerra que en los entrenamientos aprobó todas sus pruebas con un 95.9% de efectividad, el mas alto en todo el pelotón y solo igualado por el porcentaje de Gilder, que era idéntico. Dante era un tipo mas "normal". Tenia 35 años, y su vida ya estaba hecha. Padre de 2 hijos y una mujer que lo amaba, su vida era la que mas protegiamos, puesto que el tenia mucho mas que perder que nosotros. Los 4 quedamos en la misma compañia de avanzada, la compañia "M". En ese momento, no pensamos que nuestra compañia sería la "M" de muerte...

LLegó la hora. Estabamos listos. Avanzamos. El campo de guerra era un caos. Nos superaban tanto en número como en calidad de armas. Al poco tiempo, toda nuestra compañia, compuesta por 40 hombres, se separó en el caos de la batalla. Yo y mis amigos nos refugiamos en un edificio en ruinas. Estabamos agotados, casi sin municiones, y heridos. Decidimos un efectivo plan (ideado por los genios de nuestro grupo, Petit y Gilder), que consistió en avanzar al campo enemigo sigilosamente a través de los edificios, y sorprenderlos para aproderarnos de su búnker y aguantar desde ahi la llegada de refuerzos. Comenzamos a escabullirnos a travéa de los escombros y edificios en ruinas, hasta que divisamos el búnker. Su protección era mínima. Pero necesitabamos un señuelo que atrajerá a la metralleta de alto calibre para nosotros lograr entrar. Decidimos que Dante quedaria fuera, por tener familia. Y decidí ir yo, puesto que Petit y Gilder tienen toda una carrera por delante, son unos genios, grandes personas y que de seguro los ascenderán cuando volvamos, por sus excelentes desempeños. Yo, por mi parte, soy un simple soldado que mi futuro ya está tirado. Vivo solo y moriré solo, y pensé que sería lo mismo morir en ese campo de batalla que acostado en mi casa. Me acerqué a la metralleta lo mas que pude sin que me pudiera ver, y luego lanzé una granda al búnker, al mismo que corrí hacia el lado contrario de donde estaban mis amigos. La metralleta me disparaba, y yo corria lo mas que podia para evitar esa ráfaga de balas, que me conllevaria a mi mas segura desaparición de la tierra. Me refugié detrás de unos escombros, mientras las balas trataban de atravesar los escombros y mi piel, para destruir completamente algo que ya estaba destruido, como lo era yo. En ese momento, mis amigos se toman el búnker. Nos refugiamos días enteros en ese búnker, sin que tanto refuerzos como enemigos aparecieran. En eso, Dante nos hablaba de sus hijas, de lo mucho que las amaba, que eran la chispa que lo hacia luchar hasta el final en estas situaciones, y de su señora, quién siempre esta apoyandolo y ayudandolo. Petit nos contaba que, gracias a sus grandes porcentajes en las pruebas, se habia ganado una beca para estudiar el área que el quisiera. Gilder nos relató que dió una prueba especial para ser trasladado a otro país y especializarse en la infiltración de bases, la carrera mas complicada en cuanto a guerras se refiere, y que le habia ido espectacular y esta sería la última guerra que asistiría junto a nosotros. ¿Y yo? Yo no tenia nada que contar, por que nunca lo tengo. Mi vida es una monotonía, no tenia nada de contar de novia, puesto que no la tenia, ni de mi familia, puesto que los veia muy poco, ni de mi mismo, por que soy alguien solitario que no tiene ningún motivo más para vivir que el de estar en la guerra, y tampoco soy la persona mas exitosa en eso, puesto que siempre me aprueban con un miserable 47.9% de rendimiento, muy lejos de los 95.9% de Petit y Gilder. De pronto, se escuchó un estruendo. Nos atacaban. Todos fuimos a nuestras posiciones, que las decidimos por "proyección de vida". Dante estaria lanzando granadas debajo de un agujero, para evitar las balas. Petit estaria en la metralleta con un chaleco antibalas que habiamos encontrado, Gilder estaría detrás de una pila de cajas disparando cuando el fuego enemigo cesará, y yo, al ser el de menos proyección en la maldita vida que me tocó, fui al techo a disparar las últimas balas que me quedaban. La batalla fue cruda. Cada soldado enemigo que caia reflejaba en sus rostros una amargura y una desesperación. Era una vida menos. Era una viuda mas. Eran mas hijos sin sus padres. Eran mas familias sin sustento. Eran mas muertos en la absurda actividad llamada guerra. Nosotros pedimos y pedimos refuerzos, pero nunca llegaron. En los dos días y 8 horas que estuvimos peleando, matamos alrededor de 350 enemigos. Pero nuestras cansadas mentes ya se estaban debilitando muy fácil. Cuando estabamos casi destruidos física y anímicamente, Dante se gritaba a si mismo "¡¡Debo viviiiiiir!!! ¡¡Por mi familia!!", Petit se gritaba "¡¡Hazlo por tu amiga, la cual se sentirá muy mal si mueres!!". Gilder gritaba que debia vivir por que aún desea tener de novia a la chica que le gusta. ¿Y yo?. Yo no tenia nada que gritar. Solo luchaba y luchaba, sin sentir cansansio, ni miedo, ni frío. Lo hacia por que era lo único que tenia por hacer, pero nunca me importó si debía morir o no. Mi vida me era absolutamente indiferente, puesto que no tenia nada ni nadie. En el cansancio, Dante sale a tratar de buscar provisiones, cuando una maldita bala le atraviesa el pecho, saltando sangre por todos lados. Fuimos a verlo. Estaba muy mal, y no pareciera que fuera a vivir. Nos pidió que le dijeramos a su familia que la amaba mucho, y que lo disculparan por no volver. Nos entregó una carta, que debiamos entregar a su familia, y nos dijo que velaria por nosotros en el mas allá. Y sus últimas palabras, antes de que la muerte se lo llevara, fueron, increíblemente, para mi. Me dijo "Tú crees no tener nada, pero ese pensamiento te nubla. Si pudieras mirar bien, te darias cuenta que tienes mucho. Solo debes mirar a tus costados y no siempre al frente. La vida es algo muy bello, y no vale la pena vivirla solo. Yo se que tu puedes hacer lo que te propongas, siempre y cuando te lo propongas en serio. Esa persona, la cual los últimos días te ha quitado el sueño, no es alguien imposible de conquistar. Pero si no te muestras como realmente eres, jamás la tendrás. No te mires en menos, por que tú eres una persona especial. Eres quién nos ha mantenido unidos por tantos años. Recuerda mis palabras, por que se que te harán vivir la vida una mejor maneraa..." Y al pronunciar esa última palabra, su corazón se detuvo. Dante murió. Semanas después, se supo que su prometida enloqueció y tuvo que ser internada en un hospital psiquiatrico, mientras las niñas debieron ser separadas y cuidadas por distintas familias que las adoptaron. El grito de victoria de la guerra se escuchó mas fuerte que nunca esa pálida noche de invierno. Ni yo, ni Gilder ni Petit fuimos capaces de formular palabras, y solo pudimos llorar mientras tratabamos de repeler el fuego enemigo. Ahi, en ese búnker, murió alguien que era importante para mí, y luego de años, logré llorar. En ese búnker, y en ese escenario tan adverso, la muerte de Dante nos dió fuerzas para seguir luchando, hasta que logramos una tregua momentánea, para sepultar a nuestro amigo en la parte trasera del búnker. En esa fría noche, ninguno de nosotros pudo dormir. Solo nos quedamos observando la pálida noche, hasta que la salida del sol, roja por la sangre derramada el día anterior, volvió a llenar nuestros ojos de lágrimas..."

lunes, mayo 19, 2008

Prólogo

Resignación. Resignación. Hay veces en que hay que aceptar que definitivamente no puedes hacer nada. Las cosas se dan de una manera, y tu puedes intentar cambiarlas. Pero a veces, basta con mirar tu maldito escenario para darte cuenta de la cruel y dura realidad: las cosas son así, y no puedes hacer para cambiarlas. Puedes intentarlo, pero no lograras nada. Siempre tus esfuerzos se verán disminuidos o anulados por fuerzas de mucho, pero mucho mayor peso que la tuya. Son esas ocasiones donde simplemente te ves disminuido por fuerzas que son superiores a ti, en cualquier ámbito en el cual desees competir contra ellos. Por que ellos son algo que está mas allá de tu capacidad como ser humano, sin dejar de ser, seres humanos. Pero son mas que ti. Físicamente, intelectualmente, emocionalmente, etc, etc, etc. Y lo peor, es que esas personas son tus amigos. Te sientes espectacular por sus logros y sus hablidades, pero no puedes dejar de sentirte mal al ver que ellos, cuando quieren algo que tu quieres, siempre te ganarán. ¿Que haria una mujer, si tiene 3 posibles candidatos para ser su pareja? Elegir al que mas le guste. Y lógicamente, le gustará mas el que mas cualidades tenga. ¿Que puedes hacer tú, si eres uno de esos candidatos, pero tus amigos tienen muchas mas cualidades y atribuciones de las que tu podrias llegar a tener? Te sientes feliz por ellos. Muy feliz. Pero, nadie te puede quitar ese malestar. Mas que malestar, es una sensación de que esa mujer es un objeto inalcanzable. ¿Que puedes hacer tú, si tus amigos tienen miles de cosas mas para ofrecerle de las que tienes tú? ¿Que puedes hacer si esa mujer se siente atraida por uno, y el otro también está intentando lo mismo? ¿Como hacer que alguien cambie algo de buena calidad a algo de calidad regular o mala? ¿Como hacerle entender a alguien que cambie lo bueno por lo no muy bueno? No tiene ninguna lógica... Nadie lo haria. Y nadie nunca lo hará jamás. ¿Que te queda a ti por hacer? No mucho... Prácticamente nada más que agachar tu cabeza y observar la felicidad que irradiarán esas personas cuando estén juntas, mientras tu, desde un punto x en el espacio donde ellos no pueden verte, observas, y te sientes feliz por ellos, por que ambos son amigos tuyos. ¿Pero que pasa contigo? Simplemente sigues tu maldita vida, aceptando una vez mas tu derrota, y marchandote como un buen soldado que se dió cuenta que ha perdido la guerra. Sin embargo, siempre he sido un soldado que nunca acepta la derrota hasta que su cuerpo simplemente cae abatido en el campo de guerra, y su corazón de emanar ese precioso líquido rojo llamado sangre. Sus pulmones dejan de respirar. Su destruido corazón, cansado de siempre vagar solitariamenteen este cruel mundo, deja de latir. Hasta ese momento, ese soldado no cesará en su lucha por evitarle ese destino a su corazón... Ese mismo soldado escribió estas lineas, y ese mismo soldado es quién se siente mal por que esta en esa incómoda situación...

November Rain. As made famous by Guns N' Roses:
When I look into your eyes,
I can see a love restrained,
But darlin' when I hold you,
Don't you know I feel the same,
'Cause nothin' lasts forever,
And we both know hearts can change,
And it's hard to hold a candle,
In the cold November rain,
We've been through this such a long long time,
Just tryin' to kill the pain,
But lovers always come and lovers always go,
An no one's really sure who's lettin' go today,
Walking away,
If we could take the time to lay it on the line,
I could rest my head,
Just knowin' that you were mine,
All mine,
So if you want to love me,
then darlin' don't refrain,
Or I'll just end up walkin',
In the cold November rain,
Do you need some time...on your own,
Do you need some time...all alone,
Everybody needs some time...on their own,
Don't you know you need some time...all alone,
I know it's hard to keep an open heart,
When even friends seem out to harm you,
But if you could heal a broken heart,
Wouldn't time be out to charm you,
Sometimes I need some time...on my ,
own Sometimes I need some time...all alone,
Everybody needs some time...on their own,
Don't you know you need some time...all alone,
And when your fears subside,
And shadows still remain, ohhh yeahhh,
I know that you can love me,
When there's no one left to blame,
So never mind the darkness,
We still can find a way,
'Cause nothin' lasts forever,
Even cold November rain,
Don't ya think that you need somebody,
Don't ya think that you need someone,
Everybody needs somebody,
You're not the only one,
You're not the only one.

domingo, mayo 18, 2008

Se viene la tormenta...

Se vienen días negros. Lo sé. Lo puedo prever y lo puedo sentir. Los últimos días han sido negros. Parece ser que vuelvo al mismo dilema del año pasado. Días negros... negros... En donde la luz no parecia venir por ningún lado. Confusión, confusión y mas confusión. Como dice la frase de al lado, una persona puede sentirse sola, aunque mucha gente lo quiera. En estos momentos, me siento totalmente solo. Desnudo, en la oscuridad, sin ninguna luz ni protección. No se que demonios me pasa. Mi ventaja es que soy muy bueno para disimularlo. Pero no se hasta que punto pueda seguir haciendolo... Me siento mal, pero no se por que. Me siento solo. No quiero sentirme mas así. ¡¡Angel, sálvame de esta pesadilla!!Canción: "Angel" . As performed by Judas Priest:

Angel - put sad wings around me now,

Protect me from this world of sin,
So that we can rise again,
Oh angel - we can find our way somehow,
Escaping from the world we're in,
To a place where we began,
And I know we'll find,
A better place and peace of mind,
Just tell me that it's all you want - for you and me,
Angel won't you set me free,
Angel remember how we'd chase the sun,
Then reaching for the stars at night,
As our lives had just begun,
When I close my eyes I hear your velvet wings and cry,
I'm waiting here with open arms - oh can't you see,
Angel shine your light on me,
Oh angel we'll meet once more - I'll pray,
When all my sins are washed away,
Hold me inside your wings and stay,
Oh! angel take me far away,
Put sad wings around me now,
Angel take me far away,
Put sad wings around me now,
So that we can rise again.

sábado, mayo 17, 2008

A veces se aparenta algo, y se siente otra cosa...

Nuevamente, sin mayores comentarios. La foto, creo, me identifica. Saludos a los sapos.

Canción de hoy: "Don't Cry" As made famous by Guns 'N Roses.
Talk to me softly,
There is something in your eyes,
Don't hang your head in sorrow,
And please don't cry,
I know how you feel inside out,
I've been there before,
Somethin is changin' inside you,
And don't you know,
Don't you cry tonight,
I still love you baby,
Don't you cry tonight,
Don't you cry tonight,
There's a heaven above you baby,
And don't you cry tonight,
Give me a whisper,
And give me a sight,
Give me a kiss before you,
tell me goodbye,
Don't you take it so hard now,
And please don't take it so bad,
I'll still be thinkin' of you,
And the times we had...baby,
And don't you cry tonight,
Don't you cry tonight,
Don't you cry tonight,
There's a heaven above you baby,
And don't you cry tonight,
And please remember that I never lied,
And please remember,
how I felt inside now honey,
You gotta make it your own way,
But you'll be alright now sugar,
You'll feel better tomorrow,
With the morning light now baby,
And don't you cry tonight,
And don't you cry tonight,
And don't you cry tonight,
There's a heaven above you baby,
And don't you cry,
Don't you ever cry,
Don't you cry tonight,
Baby maybe someday,
Don't you cry,
Don't you ever cry,
Don't you cry,
Tonight